Hola,
Bueno tengo el honor de estrenar el blog ^^ Es que habia escrito esta historia hacia tiempo y sinceramente no sabia donde ponerla. Lo que aun no acabo de asimilar es que se la dejase a ese idiota.
Bueno caso a parte os dejo con esta pequeña leyenda que escribi el año pasado y que aunque no es muy buena y es mas bien corta, espero que os guste.
Cuenta la tradicion que en tiempos de guerra y desgracias las criaturas mas bellas de las que las leyendas hablaban huian lejos del sufrimiento y la devastacion. No querian ver sufrir a las gentes con las que a menudo convivian y huian para no ver su dolor. Sin embargo alguna siempre se negaba a partir, aunque eran muy pocas. Aquellas que se quedaban vivian escondidas en cuevas, silenciosas, esperando a que el mal se disipara. Esta historia cuenta como una de ellas salvo a un joven principe de una muerte segura.
El dia que todo sucedio cerca del bosque donde ella vivia se habia desencadenado una cruenta batalla entre dos reinos vecinos. Nadie recuerda quien empezo o gano aquella guerra, pero todos recuerdan el dolor de las perdidas en las batallas. El joven principe habia ido a la batalla en nombre de su padre que se encontraba muy enfermo. La batalla empezo rapidamente, las perdidas aumentaron vertiginosamente; el principe recibio una herida en el costado casi mortal. Apenas consiguio caminar hacia el interior del bosque.
El bosque era muy frondoso y oscuro aunque se veia con claridad en aquellos momentos. El joven principe camino por el bosque al borde del desmayo hasta que llego a un rapido rio de aguas frias y cristalinas. El principe bebio un poco de agua y tras ello se desmayo a causa de su debilidad. Justo en aquel instante la criatura paso por el lugar y conmovida por el sufrimiento del joven lo llevo hasta su cueva para curarle. Se paso toda la noche y el dia siguiente velando su sueño y lavando sus heridas.
Cuando el principe desperto se hallo en una pequeña cama, rodeado de vendas y hierbas, y observo que su herida estaba completamente sanada. Se levanto y reviso toda la estancia justo cuando volvía a por sus cosas, para irse. La joven aparecio con un cuenco de agua en las manos. El principe apenas pudo murmurar unas palabras de agradecimiento cuando supo que ella le habia curado; estaba absorto observandola. Su pelo dorado como el oro caia por su espalda escondiendo dos puntiagudas orejas, sus ojos azules como la noche le miraban debatida entre el miedo y a la alegria y su piel y ropas blancas la hacian parecer eterea.
La joven acepto su agradecimiento con su melodiosa voz y le obligo a acostarse de nuevo. Le curo la herida y luego de quedo hablando con el hasta tarde. El joven aun se quedo unos dias junto a su salvadora, hasta que estuvo completamente curado. Para ese momento habian establecido una gran amistad y ella en señal de esa amistad le dio un pequeño amuleto en forma de sol para que le protegiera de los peligros que le aguardaban de vuelta a su casa.
El principe volvio a su reino donde le recibieron como a un heroe, algunos decian que habia adquirido una belleza sobrehumana y una sabiduria privilegiada. Los años pasaban y todos los años en las fechas de la batalla el principe desaparecía por varios dias y luego regresaba si contarle a nadie donde habia estado. Nunca conto quien le habia salvado, ni que la visitaba todos los años para agradecerle su ayuda y volver a ver a su vieja amiga.
Cuando se convirtio en rey en su escudo de armas hizo poner el simbolo del sol en recuerdo al amuleto de su amiga y dicho amuleto pasaba de generacion en generacion como protector de su linaje asi como la tarea de ir todos los años a aquel bosque y llevar una ofrenda a las cercanias del rio donde el principe habia encontrado a su salvadora. Asi fue como tan solo los reyes del reino conocian la historia de aquel principe salvado por aquella bella criatura magica.
Bueno ya esta. Si os ha gustado un pequeño comentario se agradeceria y sino os ha gustado tambien.
Un saludo,
Aleena.
Bueno tengo el honor de estrenar el blog ^^ Es que habia escrito esta historia hacia tiempo y sinceramente no sabia donde ponerla. Lo que aun no acabo de asimilar es que se la dejase a ese idiota.
Bueno caso a parte os dejo con esta pequeña leyenda que escribi el año pasado y que aunque no es muy buena y es mas bien corta, espero que os guste.
Cuenta la tradicion que en tiempos de guerra y desgracias las criaturas mas bellas de las que las leyendas hablaban huian lejos del sufrimiento y la devastacion. No querian ver sufrir a las gentes con las que a menudo convivian y huian para no ver su dolor. Sin embargo alguna siempre se negaba a partir, aunque eran muy pocas. Aquellas que se quedaban vivian escondidas en cuevas, silenciosas, esperando a que el mal se disipara. Esta historia cuenta como una de ellas salvo a un joven principe de una muerte segura.
El dia que todo sucedio cerca del bosque donde ella vivia se habia desencadenado una cruenta batalla entre dos reinos vecinos. Nadie recuerda quien empezo o gano aquella guerra, pero todos recuerdan el dolor de las perdidas en las batallas. El joven principe habia ido a la batalla en nombre de su padre que se encontraba muy enfermo. La batalla empezo rapidamente, las perdidas aumentaron vertiginosamente; el principe recibio una herida en el costado casi mortal. Apenas consiguio caminar hacia el interior del bosque.
El bosque era muy frondoso y oscuro aunque se veia con claridad en aquellos momentos. El joven principe camino por el bosque al borde del desmayo hasta que llego a un rapido rio de aguas frias y cristalinas. El principe bebio un poco de agua y tras ello se desmayo a causa de su debilidad. Justo en aquel instante la criatura paso por el lugar y conmovida por el sufrimiento del joven lo llevo hasta su cueva para curarle. Se paso toda la noche y el dia siguiente velando su sueño y lavando sus heridas.
Cuando el principe desperto se hallo en una pequeña cama, rodeado de vendas y hierbas, y observo que su herida estaba completamente sanada. Se levanto y reviso toda la estancia justo cuando volvía a por sus cosas, para irse. La joven aparecio con un cuenco de agua en las manos. El principe apenas pudo murmurar unas palabras de agradecimiento cuando supo que ella le habia curado; estaba absorto observandola. Su pelo dorado como el oro caia por su espalda escondiendo dos puntiagudas orejas, sus ojos azules como la noche le miraban debatida entre el miedo y a la alegria y su piel y ropas blancas la hacian parecer eterea.
La joven acepto su agradecimiento con su melodiosa voz y le obligo a acostarse de nuevo. Le curo la herida y luego de quedo hablando con el hasta tarde. El joven aun se quedo unos dias junto a su salvadora, hasta que estuvo completamente curado. Para ese momento habian establecido una gran amistad y ella en señal de esa amistad le dio un pequeño amuleto en forma de sol para que le protegiera de los peligros que le aguardaban de vuelta a su casa.
El principe volvio a su reino donde le recibieron como a un heroe, algunos decian que habia adquirido una belleza sobrehumana y una sabiduria privilegiada. Los años pasaban y todos los años en las fechas de la batalla el principe desaparecía por varios dias y luego regresaba si contarle a nadie donde habia estado. Nunca conto quien le habia salvado, ni que la visitaba todos los años para agradecerle su ayuda y volver a ver a su vieja amiga.
Cuando se convirtio en rey en su escudo de armas hizo poner el simbolo del sol en recuerdo al amuleto de su amiga y dicho amuleto pasaba de generacion en generacion como protector de su linaje asi como la tarea de ir todos los años a aquel bosque y llevar una ofrenda a las cercanias del rio donde el principe habia encontrado a su salvadora. Asi fue como tan solo los reyes del reino conocian la historia de aquel principe salvado por aquella bella criatura magica.
Bueno ya esta. Si os ha gustado un pequeño comentario se agradeceria y sino os ha gustado tambien.
Un saludo,
Aleena.
